13. "O Pelouro" - Atención a la Diversidad


Realmente estoy descubriendo muchas cosas durante las clases, ya en la entrada numero 8 vimos un video de como era posible la educación en casa y realmente manifesté mi opinión, mis simpatías y mis miedos ante estas practicas no tan arraigadas, pero con el video de hoy de la escuela de O'Pelouro habéis despertado en mí una opinión aún más positiva hacia la descentralización de la educación.

Soy sobrino de una mujer con Síndrome de Down la cual solo tiene 6 años mas que yo, y a pesar de que ella es completamente autónoma para realizar las tareas básicas veo en ella el reflejo de aquella persona que podría haber llegado más lejos, pero por culpa del desconocimiento de las diferentes alternativas o la falta de apoyo por parte de las organizaciones se ha quedado estancada en los eternos 8 o 10 años. He crecido junto a ella y he compartido momentos como si fuera una amiga más, después pase a la adolescencia y ella se quedo atrás, cuando mi hermano pequeño llego a “su edad” volvió a ser su amigo y de nuevo la dejamos atrás.

Vemos cada día personas que tienen estas diversidades funcionales y alcanzar metas como cualquiera otro de nosotros, pero para ello es necesario que estos centros que de una manera excepcional tratan la educación de estas personas sean mas reconocidos y obtengan mayores recursos y financiaciones de los organismos para que en un futuro no muy lejano, todos, independientemente de como seamos tengamos las mismas oportunidades de alcanzar una vida plena.

Me gustaría añadir un comentario y es que me asombro la capacidad de integración de los alumnos, así como unas mas que sobradas capacidades lingüísticas y técnicas de los alumnos, ojala mi tía hubiera podido gozar de una experiencia de este calibre.

Comentarios

  1. Hola Miguel Ángel! Es una pena lo que dices, porque se nota que ves en tu tía a una persona que podría haberse desenvuelto al igual que cualquier otra, solo que no tuvo la ayuda necesaria en su momento. Aún así, no dudo que sea una gran persona y tenga un gran corazón, que al fin y al cabo es lo más importante. Ojalá estos centros tuviesen más reconocimiento, o los centros tradicionales se implicasen más con las personas con diversidad funcional, pues todos deberíamos tener las mismas oportunidades educativas. Un saludo!

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